Originally written in English. Translated by sofirilux

Así para empezar la historia, desde que era pequeña siempre he querido conocer a gente alrededor del mundo.
La idea pareció hacerse realidad después de que un anuncio aleatorio apareciera en mi página de inicio de Facebook.

«SLOWLY no es la típica app para redes o citas», «huh..estupendo» pensé. Me preguntaba qué los haría tener la audacia de decir tales palabras.
Sin más que añadir, la instalé. Resulta que realmente es algo. Al principio, nunca pensé que conocería a alguien que eventualmente se convertiría en mi dosis diaria de felicidad. Pero vaya, qué equivocada estaba.

De todas las cartas que he recibido, la suya fue bastante simplona.
Era un día regular cuando estaba limpiando el historial de búsqueda de mi teléfono, de la nada esta carta aleatoria apareció en mi barra de notificaciones: «Hey, soy un chico de Singapur. Veo que te gustan los juegos, ¿qué te gusta jugar? ¡Espero tu respuesta!». ¡Así! Simple y sosa, pero incluso así no pude evitar contestarle.

Una vez que la escritura comienza, nada puede pararnos hasta que nosotros decidamos ser detenidos.

Nos empezamos a mandar cartas de ida y vuelta hasta el punto en el que contestarle se hizo mi primera prioridad cuando regresaba a casa de la escuela.
Sus respuestas eran entretenidas, a diferencia de la primera carta que me mandó. Aunque se consideraba a sí mismo un chico chapado a la antigua que no entendía las últimas tendencias o memes, sus cartas me parecían mucho más interesantes que las que otras personas me habían mandado.
Las cartas se hicieron más largas una después de otra. Me había dado cuenta que escribir una carta tomaba alrededor de dos horas de mi tiempo, con cada una de ellas conteniendo un promedio de miles de palabras.

Hablamos de nuestra vida escolar, nuestras preferencias musicales, cómo manejábamos nuestros problemas con nuestros amigos, cómo el apellido de su madre se parecía al mío… Compartí mi amor por la química al enseñarle los cristales de sal que había hecho en mi tiempo libre, a los que en cambio él me mandó una foto de su pc. Extraño, pero así es él, y me encanta. Siempre me preocupaba que él no durmiera lo suficiente considerando que siempre me contestaba a la 1AM o por ahí.

Escribir cartas con él me ayudó mucho a descubrir cómo se sentía establecer una amistad completamente nueva, y me enseñó a intentar escuchar lo que otras personas pensaban. He aprendido mucho de él, paciencia, ser considerada e intentar resolver problemas racionalmente.

En la carta número 35 que me mandó (sí, sí las cuento), preguntó si deberíamos agregarnos en otra plataforma. Le dije que sí y empezamos a hablar por otros lados, pero igual nos escribíamos por Slowly ya que es donde nos conocimos. Slowly tiene esta atracción mágica para mí que me impulsa a continuar escribiendo sin parar y sin cansarme de ello.

Todo iba bien hasta la carta número 96. Él paró de responder. Durante las primeras semanas pensé que solo debía esperar pacientemente y que él contestaría eventualmente. Pero no, no lo hizo. Pasaron meses y yo estaba confundida y frustrada, seguía revisando las cartas que había enviado, tratando de descifrar si había sido porque había dicho algo ofensivo. Resulta que no dije nada ofensivo ni insultante. Nunca lo haría, no a él. Eso solo me confundió aún más.

Quería mandarle un mensaje, preguntándole qué fue lo que salió mal. Pero la introvertida en mí me impidió hacer eso, preocupándome que él pensaría que yo lo estaba molestando. Y así la pregunta se quedó sin respuesta en mi mente. Desde entonces eliminé la cuenta. No tiene sentido quedarse con uno cuando tu autoestima ha sido destruida por alguien que considerabas un buen amigo que deja de responderte. Quizá finalmente tenga el valor suficiente para preguntarle después de escribir esto.

Estoy agradecida de que la app lo encaminara conmigo. Incluso aunque no me contestó por aquí, todavía me alegra el día cada vez que me siento deprimida en otras plataformas.

Y ahora después de 8 meses, he decidido crear una nueva cuenta con la esperanza de tener un nuevo comienzo, esta vez cumpliendo con lo que siempre he querido hacer: conocer gente alrededor del mundo. Intercambiar sellos exclusivos, entender las diferencias culturales entre personas de distintos países. Mientras que también conozca nuevas personas con las que valga la pena construir una amistad.

Ahora, sabiendo que las personas desaparecerían sin dejar ningún mensaje, he tratado de no ser tan dependiente. Aparte de contestar, he tratado de no pasar una cantidad de tiempo poco sana en esta app. Todavía disfruto escribir, pero las cosas son diferentes esta vez. Me siento más relajada y tranquila. Las personas aquí son muy amigables y acogedoras, lo amo mucho.

Las palabras no pueden expresar lo feliz que me siento de encontrar esta app. Realmente se destaca entre las demás aplicaciones que se pueden encontrar en las tiendas. Los tipos raros se filtran después de saber que las cartas requieren tiempo para llegar al otro lado (¡esta es mi característica favorita en la app!), lo que permite a los introvertidos (es decir, yo) compartir nuestros pensamientos con las personas sin sentirnos incómodos y tímidos.
De todos modos, es difícil encontrar una aplicación de redes que lleve un paso lento como esta. ¡Sigan con el buen trabajo Slowly!